Armar la maleta para las vacaciones puede parecer una tarea sencilla, pero muchas veces terminamos llevando más de lo necesario o, peor aún, olvidando lo esencial. El arte de empacar bien es una habilidad que se entrena con la experiencia, pero también con información útil. En Viajando.travel te contamos los mejores tips para hacerla de la mejor manera.
Tips para preparar la maleta con cuidado es el primer paso para unas vacaciones sin preocupaciones y listas para la aventura
Si estás por emprender un viaje y quieres optimizar cada centímetro de tu equipaje, estos consejos prácticos te van a ayudar a reducir volumen sin sacrificar comodidad. Desde la elección de prendas hasta la distribución interna, todo cuenta cuando se trata de ahorrar espacio.
Vacaciones con prendas versátiles y combinables
La clave para empacar ligero está en seleccionar ropa que puedas usar en diferentes situaciones. Apuesta por colores neutros y prendas que se puedan superponer. De esta manera, con pocas piezas vas a poder armar múltiples outfits, tanto para el día como para la noche esenciales en tus viajes.
También puedes optar por tejidos livianos y que no se arruguen fácilmente, como el poliéster o el algodón liviano. Esto te permite doblar la ropa sin preocuparte demasiado por el planchado al llegar a destino.
Además, evita llevar prendas “por si acaso”. En la mayoría de los viajes, terminamos usando siempre lo mismo. Sé realista con el clima y las actividades que vas a hacer.
Un buen truco es armar los conjuntos antes de empacar y fotografiarlos, así sabes exactamente qué vas a usar y cuándo, y evitas cargar ropa innecesaria.
Tips para ahorrar espacio doblando ropa
Una de las técnicas más efectivas para ahorrar espacio es enrollar la ropa en lugar de doblarla. Esto no solo reduce el volumen, sino que también minimiza las arrugas y te permite ver mejor lo que llevas.
Al enrollar camisetas, pantalones, vestidos o ropa interior, vas a notar cómo se aprovechan mejor los rincones de la maleta. Incluso puedes usar bandas elásticas o bolsitas de tela para mantener los rollos bien compactos.
Esta técnica es ideal para los que llevan mochilas o equipaje de mano, donde cada centímetro cuenta. Además, al tener todo enrollado, accedés más rápido a lo que necesitás sin desordenar el resto.
Combiná esta técnica con organizadores de equipaje o cubos de compresión para potenciar aún más el ahorro de espacio.
Usa bolsas al vacío o packing cubes
Las bolsas al vacío son una excelente herramienta para reducir el tamaño de la ropa, especialmente si llevas prendas voluminosas como chaquetas o sweaters. Al extraer el aire, el volumen baja considerablemente, liberando espacio para otras cosas.
Por otro lado, los packing cubes o cubos de embalaje son ideales para mantener la maleta ordenada y separada por categorías: ropa, calzado, ropa interior, accesorios, etc. Esto te permite encontrar lo que necesitas sin desarmar todo.
Ambas opciones son reutilizables, ligeras y muy prácticas. Además, puedes combinarlas según el tipo de viaje: más bolsas al vacío en invierno, más packing cubes en climas cálidos.
Invertir en estos accesorios puede parecer innecesario al principio, pero una vez que los usas, difícilmente vuelvas al caos de empacar sin sistema.
Aprovecha cada rincón y espacio vacío
Los zapatos, por ejemplo, suelen ocupar mucho espacio, pero también ofrecen huecos perfectos para guardar cosas pequeñas como medias, cargadores o cosméticos bien sellados. No dejes esos espacios vacíos.
Usa los bolsillos interiores y exteriores de la maleta guardar objetos planos como documentos, libros o dispositivos electrónicos. Así liberas el espacio central para lo más voluminoso.
Si llevas sombreros o gorras, rellénalos con ropa interior o bufandas para que mantengan la forma y no te roben lugar. Cada hueco cuenta cuando el espacio es limitado.
Finalmente, coloca las prendas más pesadas en el fondo del equipaje (cerca de las ruedas, si las tiene) para lograr una mejor distribución del peso y facilitar el traslado.
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